Shiatsu

Aunque la traducción literal de la palabra shiatsu es presión con los dedos, no debe confundirse con la digitopuntura, otra de las terapias alternativas. Entre otras cosas, porque el shiatsu es una terapia manual que emplea, además de los dedos, las palmas de las manos para presionar determinados puntos y zonas del cuerpo humano.

De origen japonés, el Ministerio de Sanidad de este país lo define como: "Tratamiento que, aplicando unas presiones con los dedos pulgares y las palmas de las manos sobre determinados puntos, corrige irregularidades, mantiene y mejora la salud, contribuye a aliviar ciertas enfermedades (molestias, dolores, estrés, trastornos nerviosos etc.), activando así mismo la capacidad de autocuración del cuerpo humano. No tiene efectos secundarios".

El shiatsu, como otras terapias orientales, es preventiva porque refuerza el sistema inmunológico, eleva el tono vital, mejora el metabolismo, aumenta el rendimiento físico e intelectual, equilibra el sistema nervioso autónomo, despierta la conciencia del cuerpo e incluso mejora las relaciones humanas.

Como tratamiento de enfermedades o dolencias, esta terapia no combate los síntomas, sino que va al origen y despierta el poder curativo del cuerpo. No cura por sí misma, sólo ayuda al paciente a recuperar y mantener su equilibrio, su estado de armonía natural, su salud.

Los masajes de shiatsu se reciben vestidos y sobre una superficie dura o semidura.